Nosotros, los seres humanos, somos unas criaturas fascinantes, hemos sido capaces de dominar y moldear el mundo a nuestra voluntad. Somos únicos, somos los seres más inteligentes en muchos kilómetros a la redonda, puede que hasta los seres más inteligentes del Universo. ¿Qué habilidades tenemos que nos hacen tan especiales? ¡Vamos a comprobar los límites del ser humano!
Cerebro
Nuestro cerebro es la cosa más compleja de la que tenemos constancia, ya que apenas sabemos como funciona. Aunque sí que conocemos algunos datos bastante sorprendentes que nos permiten llegar a los límites del ser humano.
Cuando nos damos un golpe u oímos como alguien nos llama nos damos cuenta casi al instante. Nuestro tiempo de reacción es bastante bajo, para ello los impulsos eléctricos del cerebro viajan a una velocidad de 275 km/h.
Nuestro cerebro necesita para funcionar la misma energía que una bombilla: unos 10 watios aproximadamente. Es impactante lo eficiente que es nuestro cuerpo al respecto. Además, es capaz de almacenar 2,5 petabytes (1 petabyte es un millón de gigabytes) de memoria. Para comparar, toda la web de Wikipedia ocupa unos 40 terabytes (1 terabyte son 1000 gigabytes).
Nuestro cerebro está formado en un 80 % por agua, consume el 20 % del oxígeno que llega a nuestros pulmones y sorprendentemente, es más activo durante la noche que por el día. Sin embargo todavía no sabemos exactamente por qué.
Vista
Poseemos un sentido de la vista muy desarrollado, que nos permite ver con amplio detalle el mundo que nos rodea. Somos capaces de ver objetos a distancias infinitamente grandes o pequeñas. ¿Cómo? Mientras estos objetos emitan la suficiente cantidad de fotones, los conos (células fotosensibles de los ojos) serán capaces de captar la luz y podremos verlos.
Por poner un ejemplo, en una noche clara somos capaces de ver la galaxia de Andrómeda, situada a 2,6 millones de años luz de nosotros. Así que si no podemos ver el Everest desde nuestra casa, es porque la propia curvatura de la Tierra nos tapa la vista.
¿Y cuántos colores somos capaces de ver? Tenemos tres tipos de conos, uno para el rojo, otro para el verde y otro para el azul. Combinando la información que obtenemos de estos conos somos capaces de ver millones de colores. Aunque hay que destacar que hay personas a las que les faltan cierto tipo de conos, y son incapaces de ver determinadas tonalidades.
Olfato
Nuestro olfato no está tan desarrollado como la vista. Ya que nosotros nos guíamos más por el oído y la vista que los demás animales, los límites del ser humano con respecto al oído son evidentes. Por cierto, ¿sabías que el agujero izquierdo de nuestra nariz capta mejor los olores que el derecho? Es más, la nariz por norma general no se sitúa en medio de nuestra cara, sino que está posicionada un poco más a la derecha. Estas diferencias nos permiten guiarnos por los olores, ya que si captáramos los olores de igual manera por ambos lados no sabríamos decir de dónde provienen.
Una persona corriente es capaz de percibir y diferenciar entre 100 y 200 olores mientras que los niños y trabajadores de la industria del perfume son capaces de distinguir bastantes más, alcanzando la cifra de entre 600 y 800 olores. Se estima que en la naturaleza hay más de 110.000 olores distintos.
Para captar un olor, varias moléculas de una sustancia (aproximadamente cincuenta, ocho como mínimo) deben ser detectadas por las células olfativas de nuestra nariz. Además, el sentido del olfato está ligado al sentido del gusto. Por eso cuando estamos resfriados las cosas no nos saben igual.
Pero nuestro olfato todavía guarda un secreto sorprendente: sirve como brújula gracias a pequeños cristales de hierro que tenemos en los senos nasales. Es una habilidad que nosotros ya hemos perdido por no usarla, pero los indígenas y nómadas todavía la conservan y son capaces de hallar el norte para no perderse en las grandes selvas, desiertos y estepas en las que viven.
Gusto
Los humanos solo somos capaces de diferenciar cinco sabores (aunque se está investigando un sexto) : dulce, amargo, ácido, salado y umami. El umami se ha descubierto recientemente y es el sabor que poseen algunos alimentos como el queso parmesano, el jamón curado, la anchoa o el tomate seco.
Tenemos entre 2.000 y 4.000 papilas gustativas situadas principalmente en la lengua que nos permiten conocer y diferenciar los sabores. Estas papilas son casi invisibles para el ojo humano.
Por otro lado, nuestra lengua está formada por varios músculos (8) que son, además, los únicos músculos que trabajan con independencia del esqueleto. Estos músculos permiten su movimiento y también engordan, al igual que nosotros. Además, la parte trasera de nuestra lengua es bastante sensible a los sabores amargos: esto sirve para detectar comida venenosa, podrida o caducada y poder escupirla antes de tragarla.
Oído
No tenemos los oídos tan desarrollados como los perros, por ejemplo., pero aún así somos capaces de hazañas sorprendentes.
Como ya sabemos, conforme pasan los años vamos perdiendo capacidad auditiva, por ello las personas mayores oyen peor. Los sonidos se miden en decibelios (en adelante, db). Nosotros los humanos no podemos oír ningún sonido que baje o iguale 0 db (umbral de audición) o supere los 160 db. Una diferencia de 10 decibelios significa que un sonido es el doble de alto que el otro.
De hecho los sonidos de 160 db son capaces de reventar nuestro tímpano. En 1883, la erupción del volcán Krakatoa provocó tal estruendo que rompió los tímpanos de todas las personas situadas en un radio de 65 km del volcán. La sonoridad de la erupción se estima en 180 decibelios.
Tacto
¿Cómo de sensible es nuestra piel? Según investigaciones del Dr. Mandayam Srinivasan es muy, muy sensible. Sus pruebas consistían en la impresión de puntos extremadamente diminutos en cristales planos y tocarlos para ver si éramos capaces de notar la existencia de ese punto. Un punto de 3 micrómetros de altura seguía siendo palpable. Si Srinivasan usaba una textura más rugosa con una altura de 75 nanómetros también se podía palpar. Para comparar, una molécula de ADN mide 2 nanómetros de ancho. ¡Increíble!
Otros límites del ser humano
¡Pero somos capaces de mucho más! Somos capaces (quizá no todos) de correr a 45 km/h como Bolt, o incluso más, ya que según estudios científicos el cuerpo humano puede alcanzar los 64 km/h, de levantar 450 kilos hasta el muslo (o en su defecto 263.5 kilos por encima de la cabeza), de correr maratones, de vivir 122 años y de medir 2.72 metros entre muchas otras cosas.
En fin, límites del ser humano… quizá dentro de poco estos límites del ser humano dejen de existir para nosotros, cuando superemos la próxima barrera tecnológica.
¡Qué Curioso!