Imaginad que lleváis una semana vagando por el desierto, el agua se os ha acabado, apenas tenéis fuerzas para seguir, y de repente, ¡os encontráis una piscina! Seguramente os frotaríais los ojos y os diríais que es una alucinación. Pero no, es perfectamente posible: ¡existe una piscina secreta en el desierto del Mojave, en California!
Pero, ¿cómo? ¿Qué hace una piscina en un desierto? Todo fue obra de un artista austríaco llamado Alfredo Barsuglia, que es de ese tipo de artistas que no buscan motivo alguno para hacer las cosas. El nombre de su obra: «Social Pool» (Piscina Social) ya lo dice todo.